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ToggleLa hemoglobina glicosilada es un indicador clave en el manejo de la diabetes, reflejando el control del azúcar en sangre a lo largo de varios meses. Esta prueba, fundamental tanto para el diagnóstico como para el seguimiento de dicha enfermedad, ofrece una visión promediada de la glucosa en sangre, permitiendo a médicos y pacientes tomar decisiones informadas sobre el tratamiento.
¿Qué es la hemoglobina glicosilada?
La hemoglobina glicosilada con siglas HbA1c, también conocida como hemoglobina glicada o glicohemoglobina, guarda una relación directa entre su porcentaje en el organismo y el promedio de glucosa sérica de una persona, por lo que se ha dicho que la HbA1c refleja la glucemia media del individuo en un lapso de 120 días previos a la toma, tiempo de la vida media del eritrocito.
¿Por qué se realiza la prueba de hemoglobina glicosilada?
La hemoglobina glicosilada está disponible como prueba clínica desde la década de los 70, pero no fue hasta los años 90 que la tecnología y la práctica demostraron la utilidad clínica en el manejo de los pacientes, gracias a su naturaleza es utilizada desde entonces como un indicador de control metabólico en el tratamiento de la diabetes, otorgando un seguimiento, un control y un tratamiento más eficiente de la hiperglucemia.
La Asociación Americana de Diabetes (ADA) la recomienda como parte de los estudios de diagnóstico, considerado como uno de los principales apoyos para la detección de Diabetes Mellitus tipo 2 (DM2), adoptando en el 2010 el criterio de punto de corte mayor o igual a 6.5% de HbA1c.
Pruebas de laboratorio para medir la hemoglobina glicosilada
La hemoglobina glicosilada se obtiene con una toma de muestra sanguínea común, puede realizarse una extracción venosa central de la parte interna del antebrazo o con una punción capilar en la punta del dedo como prueba rápida solicitada por el médico tratante como un complemento a los estudios periódicos y de seguimiento de los pacientes.
La HbA1c ofrece mayores ventajas en el diagnóstico al no requerir ayuno por parte del paciente, al reflejar el promedio de glucosa sanguínea de 3 a 4 meses previos, tiene menor variabilidad entre los individuos y puede predecir y reducir las complicaciones relacionadas con la DM2 (retinopatía 76%, microalbuminuria 34%, macroalbuminuria 44%, neuropatía 64%), no se altera con el estrés y no presenta inestabilidad de la muestra.
Consejos para mejorar los niveles de HbA1c
La hemoglobina glicosilada es más que un simple número en un análisis de laboratorio; es una herramienta poderosa para el manejo de la diabetes. Entender su importancia y cómo mejorar sus niveles puede marcar una gran diferencia en la calidad de vida de las personas afectadas por esta condición. Aquí algunos consejos para lograrlo:
- Adoptar una dieta balanceada. Incluir en la alimentación diaria frutas, verduras, granos integrales y proteínas magras.
- Realizar actividad física regularmente. Se recomienda al menos 150 minutos de ejercicio moderado a la semana.
- Monitorear los niveles de glucosa en sangre. Esto ayuda a realizar ajustes oportunos en la dieta y el tratamiento.
- Seguir el tratamiento médico. La medicación prescrita por el profesional de la salud debe tomarse de manera rigurosa.
Preguntas frecuentes
¿Dónde puedo realizarme este estudio?
El estudio de hemoglobina glicosilada puede realizarse en laboratorios clínicos, hospitales y clínicas especializadas en el tratamiento de la diabetes. Es importante seleccionar un centro de salud que cuente con la certificación y los estándares de calidad necesarios para garantizar resultados precisos. La accesibilidad y la tecnología de punta son factores a considerar al elegir dónde realizar este importante análisis.
¿Cuándo hacer el análisis?
Por lo general, esta prueba se solicita como verificador del control y apego del paciente a su tratamiento, también como un indicativo del valor predictivo de glucemia promedio mensual. La frecuencia con la cual se debe medir la HbA1c depende de la evolución del paciente, y en este caso, la ADA recomienda:
- La frecuencia recomendada para medir la HbA1c a los pacientes con diabetes es de cada 3 a 6 meses en pacientes con enfermedad estable y sin cambios en el esquema de tratamiento.
- Medir la HbA1c cada 3 meses en los pacientes en quienes se hagan cambios en el manejo terapéutico o en los cuales no se alcance un nivel de glucemia determinado.
- Los objetivos de los indicadores de laboratorio se deben individualizar, a pesar de que la mayoría de los organismos considera una buena meta para los pacientes con diabetes tipo 2, una HbA1c menor a 7% para reducir el riesgo de complicaciones microvasculares y complicaciones macrovasculares.
- Para lograr una HbA1c menor a 7%, los pacientes con diabetes tipo 2 deberían tratar de lograr una glucemia plasmática en ayunas o una glucemia plasmática preprandial entre 72 mg/dL y 126 mg/dL, y una glucemia posprandial a las dos horas entre 90 mg/dL y 180 mg/Dl.
¿Qué significa el resultado?
Los resultados de la hemoglobina glicosilada se presentan en porcentaje. Un nivel de HbA1c por debajo del 5.7% se considera normal, mientras que un rango entre 5.7% y 6.4% indica prediabetes. Un resultado de 6.5% o superior en dos ocasiones distintas se diagnostica como diabetes.
Cuando los valores de hemoglobina resultan elevados, es necesario acudir con el médico para recibir orientación y valoración, puesto que esto nos habla de un mal control glucémico. El profesional le solicitará estudios complementarios, ajustará las dosis de sus medicamentos y le pedirá realizar una valoración nutricional con una adecuada medicación y dieta los niveles de HbA1c comenzarán a disminuir paulatinamente.